Durante siglos, la sexualidad femenina ha sido rodeada de tabúes, prejuicios y mitos que han limitado la libertad y el empoderamiento de las mujeres. En lugar de ser un espacio de autoconocimiento y placer, ha sido reprimida, silenciada y estigmatizada.
En DeSSé creemos que el placer es un derecho y es hora de derribar esos mitos que aún nos pesan. A continuación, desglosamos algunos de los más comunes y los contrastamos con la realidad.
- Mito 1: Las mujeres tienen menos deseo sexual que los hombres
La idea de que las mujeres tienen un menor deseo sexual ha sido perpetuada a lo largo de la historia, y no es más que una construcción social que limita nuestra libertad sexual.
Realidad: El deseo sexual no está relacionado con el género, sino con factores personales, emocionales y biológicos. Las mujeres sienten deseo, y ese deseo puede ser tan intenso como el de cualquier otra persona. Lo que sucede es que, en muchas ocasiones, hemos aprendido a reprimirlo por miedo al juicio social. ¡Es hora de liberarlo y vivirlo plenamente!
- Mito 2: Las mujeres sólo disfrutan del sexo dentro de una relación amorosa
La sociedad patriarcal ha sostenido que las mujeres sólo deberían tener relaciones sexuales dentro de vínculos afectivos y estables, dejando de lado la diversidad de deseos y experiencias que cada una pueda tener.
Realidad: Las mujeres pueden disfrutar del sexo tanto dentro como fuera de una relación. El placer sexual es una vivencia propia y autónoma, y no está necesariamente ligada al amor romántico. Explorar la sexualidad desde la libertad nos permite descubrir lo que realmente nos hace sentir bien, sin importar las expectativas externas.
- Mito 3: El orgasmo vaginal es el “verdadero” orgasmo
Este mito ha reforzado la idea de que existe una jerarquía en el placer femenino, colocando el orgasmo vaginal por encima del orgasmo clitoriano.
Realidad: El orgasmo clitoriano es el más común entre las mujeres y es perfectamente válido. El clítoris tiene más terminaciones nerviosas que cualquier otra parte del cuerpo, ¡más de 8.000! Cada mujer vive su placer de forma única, y no existe un “tipo” de orgasmo superior al otro. El poder radica en conocer nuestro cuerpo y disfrutarlo en todas sus formas.
- Mito 4: El deseo sexual disminuye con la edad
Se nos ha hecho creer que con los años, las mujeres dejamos de sentir deseo sexual, como si la sexualidad fuera exclusiva de la juventud.
Realidad: Muchas mujeres descubren su máximo potencial sexual en la madurez. A medida que envejecemos, nos conocemos mejor, entendemos nuestras necesidades y nos sentimos más seguras de expresar nuestros deseos. La sexualidad no tiene fecha de vencimiento.
En DeSSé, creemos que es fundamental desmitificar la sexualidad femenina para empoderarnos y vivirla en toda su plenitud. ¡El placer es nuestro derecho, y es momento de reivindicarlo!

ABRAZAR NUESTRA SEXUALIDAD
ES UN ACTO DE PODER